¿Te has dado cuenta, que las personas que compran un producto cosmético, quieren saber si el producto es un producto cosmético natural o ecológico?
Es ideal que todos usemos productos naturales o ecológicos, porque de esta manera estamos utilizando productos vegetales sin dañar el medio ambiente, sin dañarnos nosotros y que no generan ningún tipo de sufrimiento al mundo animal.
Se pueden hacer productos cosméticos que cumplan nuestras expectativas, con respecto al aroma, color, consistencia, durabilidad y efecto, o en la práctica queremos utilizar un producto natural o ecológico, pero que funcione igual que un sintético. Creo que ahí está el error, si nosotros queremos entrar en este mundo de utilizar un producto cosmético natural o ecológico, tenemos que pensar que no deberían tener aromas sintéticos, tampoco tener una durabilidad a largo plazo, su efecto no necesariamente tiene que ser duradero y además no podría tener un color particular. Para poder entrar en este mundo de la sustentabilidad tenemos que cambiar el chip.
Si utilizamos productos que tienen certificación cosmética como natural o ecológica, tenemos que saber que son aquellos que han pasado por un proceso exhaustivo de revisión de los ingredientes y del producto final terminado. Lo que hoy día no es fácil, ya que requiere de procedimientos muy rigurosos que aseguren que el ingrediente o producto final no va a estar expuesto a ningún contaminante o pesticidas, desde el sembrado hasta la distribución del producto.
Hoy día el número de materias primas natural o ecológico aún es reducido, lo que limita la adquisición de componentes para el desarrollo de un producto cosmético terminado y que cumpla con los requisitos exigidos para certificarse, esto es más complejo y difícil cuando queremos desarrollar un producto cosmético final ecológico en Chile, es más fácil importar productos europeos que están cumplimiento estás normas hace bastante tiempo. Nosotros estamos empezando en los procesos de certificación, es una ardua tarea, principalmente por los costos que esto implica, pero es una oportunidad tanto para nosotros los desarrolladores de productos cosméticos, como los fabricantes de materias primas naturales o ecológicos.
¿Sabías que cuando registras o inscribes un producto cosmético, la entidad regulatoria de tu país no revisa si tu producto es natural o ecológico?. Estas entidades regulatoria que hay que cada país son fiscalizadores de la elaboración de los productos cosméticos (ISP/Chile, ANMAT/Argentina, ANVISA/Brasil, INVIMA/Colombia, DIGEMID/Perú, etc..), tiene la función de autorizar la venta de los productos cosméticos en tu país, por medio del proceso de registro o la inscripción del producto, se preocupan de que el producto cumpla con los estudios de estabilidad del producto cosmético registrado, que sea un producto cosmético seguro para ser utilizado por las personas, que contengan las materias primas cosméticas permitidas internacionalmente y que el interior del producto cosmético corresponda a lo indicado en la etiqueta.
Ahora bien, si quieres tener la certeza que tu producto agrícola o cosmético comprado en el comercio es realmente un producto natural o ecológico, no es necesario que lleves el producto a las empresas certificadoras para que te lo confirmen o que revises sus listados de marcas, cada producto que es certificado por estas empresas lleva en el envase un logo característico. Este logo permite diferenciar cuales son las marcas, y dentro de estas, cuales son los productos o ingredientes catalogados como natural o ecológico.
Ahora en Chile, se creó después de mucho tiempo, el Sistema Nacional de Certificación para Productos Orgánicos Agrícola, bajo la ley orgánica 20.089, y donde el SAG (Servicio Agrícola Ganadero) que es la autoridad competente responsable de fiscalizar el cumplimiento de la normativa. Esta ley tiene la finalidad de asegurar y certificar que los productos agrícolas orgánicos sean producidos, elaborados, envasados y manejados de acuerdo a una normativa establecida, de esta manera se incrementa la seguridad a los consumidores nacionales y extranjeros y se confirma que se están produciendo productos agrícolas sanos y de calidad. Estos productos certificados como productos orgánicos por el SAG van a contar con el siguiente logo.
Las empresas certificadoras de productos se ubican en distintos paises y las más conocidas son:
BDIH: Asociación de Industrias y Firmas de Comercio sin fines de lucro para productos farmacéuticos, productos para el cuidado de la salud, suplementos alimenticios y productos de higiene personal desarrollado en Alemania.
ECOCERT: Organismo de certificación para el desarrollo sostenible, desarrollado en Francia
COSMEBIO: La asociación Cosmebio nació en 2002 en Francia , así los consumidores tendrían un punto de referencia confiable para clasificar las diferentes demandas de comercialización.
SOIL ASSOCIATION: The Soil Association es una organización benéfica con sede en el Reino Unido. Fundado en 1946, tiene más de 27,000 miembros hoy.
AIAB: La AIAB es la Asociación Italiana de Agricultura Biológica que crea las normas de certificación y emite el certificado a los cosméticos “Cosmesi Bio Eco”
NATRUE: NATRUE es una asociación internacional sin ánimo de lucro con sede en Bruselas que se dedica a promover y proteger los cosméticos naturales y orgánicos en todo el mundo. Fundada en 2007
ICEA: es un consorcio sin fines de lucro en el que participan entidades, asociaciones, empresas y organizaciones de la sociedad civil. Verifica y certifica a miles de empresas que desarrollan su actividad profesional en relación con el hombre y el medio ambiente, protegiendo la dignidad de los trabajadores y los derechos de los consumidores. ICEA proviene de la experiencia de AIAB (Asociación Italiana para la Agricultura Orgánica)
Algunos de estos representantes se unieron ( BDIH, Cosmebio, Ecocert Greenlife SAS, ICEA, Soil Association) y desarrollaron la norma de certificación COSMO ( Cosmetic Organic Standar) cuyo objetivo es establecer requisitos mínimos comunes, armonizar las normas de certificación cosmética orgánica y natural.
Para esto modificaron sus logos armonizándolos todos con COSMO NATURAL si el producto cosmético es natural o COSMO ORGANIC si el producto cosmético natural es ecológico.
Los productos certificados que cumplan con las reglas indicadas por las empresas certificadoras podran denominarse como “producto ecológico” o sus equivalentes como “producto orgánico”, “productos biológicos”, “bio”, “eco”.
Los productos cosméticos deben cumplir la regla base para entrar al proceso de certificación donde:
a) La suma de los ingredientes de origen natural son de un 95% y el 5 % restante puede contener ingredientes sínteticos.
A partir de esta base se certifica si los % de los ingredientes cosméticos o el producto cosmético final son un producto natural o un producto natural ecológico.
En el siguiente Curso conocerás en detalle esta información: